Los cambios sucesivos en la conducción técnica no habían dejado ningún resultado positivo. Estudiantes buscaba su identidad, trataba de retornar a la senda de los grandes éxitos, y entonces se optó por conseguir nuevamente los servicios de Carlos Salvador Bilardo cuya experiencia de 1971 había dejado gratamente impresionada a la parcialidad y dirigentes de la entidad. El 9 de enero de 1973 Bilardo tomó las riendas de la escuadra pincharrata y no abandonaría tal conducción hasta fines de 1976. En el transcurso de esas cuatro temporadas, el equipo produjo actuaciones sumamente meritorias, y el técnico se consolidó definitivamente como uno de los mas positivos de la época.
Esa escuadra se armó con varios elementos provenientes de las inferiores, y en 1974 llego a encaramarse en los puestos de vanguardia, aunque la propia inexperiencia y los desacoples lógicos de un equipo "nuevo" no permitieron concluir con éxito la empresa.
Se habian alejado del club Rubén Horacio Galletti, transferido al Universidad Autónoma de Guadalajara (México) en una cifra récord para la Argentina y también habia sido cedido a un empresario que lo colocó en el exterior, José Ignacio Peña, cuyo aporte de goleador lo llevó a situarse entre los scorers más positivos del futbol nacional. Llegaron para 1974, Miguel Angel Benito, de Vélez Sársfield, luego de arduas y dificultosas tratativas (el centrodelantero era codiciado por varios elencos de los denominados grandes), y José Tagliani, un experimentado zaguero, entre otros. Todo estaba preparado para que 1975 sea el gran año. Y realmente lo fue...
1975 fue el mejor año de todos en esta segunda etapa de Carlos Salvador Bilardo como orientador técnico. El equipo base de entonces: Pezzano; Pagnanini, Tagliani, Horacio Rodriguez y Frassoldatti; Reguera, Pachamé y Carlos López; Galletti (retornado de México), Cabezas o Benito y Juan Ramon Verón (regresado de Grecia); dieron que hablar. Había recurrido Bilardo a la experlencia de un marcador, que como Franco Frassoldatti, ya había sido campeón con Chacarita; también se agregaron Carlos Pachamé, que volvía de Boca, Rubén Galletti, repatriado luego de un período exitoso en México y Juan Ramón Verón. Algunos apellidos famosos para el futbol de entonces en nuestro país, y otros que habían sido artífices de la sensacional campaña copera.
En el campeonato Nacional, los estudiantiles arrancan con todo. La solvencia de una zaga sin fisuras, el excelente acople de Pachamé y Carlos Ángel López en el medio sumado al pujante contragolpe de la tripleta atacante fue dando por tierra con varlos "cucos" de la apoca. Aquel equipo había conseguido un equilibrio total en su estructura y, como puntualizaba Bilardo: "No se puede hablar de fútbol defensivo, porque cuando la tiene Carlitos López, y consigue encontrarse con Verón, Galletti o Benito, se produce un juego efectivo, preciso y penetrante. . ."
Por ese entonces, el torneo Nacional clasificaba a ocho conjuntos a la ronda de las definiciones. Estudiantes fue dejando en el camino, a Talleres de Cordoba, Central, Témperley, hasta llegar al recordado topetazo con Rlver Plate en la cancha de Vélez Sársfield. Ese día, el coloso de Liniers presentaba un marco espectacular desde muy temprano. El partido se jugo a las 21, pero desde mucho antes, las graderias ofrecían un lleno total. Se materializaba un duelo muy esperado: el River de Labruna que en el Metropolitano había conquistado el título de campeón, tras 18 años sin vuelta olímpica, frente a la computadora de Bilardo. ..
No todo fue negativo en esa temporada. A raíz de haber ganado River los dos torneos argentinos, debía dirimirse quien lo acompañaría en la Copa Libertadores de América, ya que en ese entonces se había puesto en práctica la participación de dos representantes por país en ese certamen. Se formalizó entonces un cotejo, en cancha neutral, entre Huracán, subcampeón Metropolitano, y Estudiantes, segundo en el Nacional. El lance, disputado en enero de 1976, en el estadio de Racing estuvo rodeado de una expectativa inusual, ya que los albirrojos podrían retornar al torneo de América. El partido finalizó con la victoria de los pinchas por 3 tantos contra 2, luego de 90 dramáticos minutos. Marcaron los goles Frassoldatti, Héctor Milano y Juan Ramón Verón.
De nuevo en la Copa, otra vez los compromisos internacionales, aunque en esta oportunldad sin los resultados de las veces anteriores. Le toco a los alblrrojos enfrentarse a los representantes venezolanos (Estudiantes de Mérida y Portuguesa), junto a River. Los "millonarios" conquistaron el primer lugar en la zona postergando las ilusiones pincharratas.
Por ese entonces volvió a emigrar Juan Ramón Verón, quien en esta ocasión era tentado por el fútbol colombiano. En 1976, la actuación rojiblanca tuvo muchos altibajos, y se acercaba un nuevo cambio de rumbo en la dirección técnica del equipo...
El 5 de enero de 1977. Carlos Salvador Bilardo ratificó su decisión de dejar Estudiantes. El mismo, lo explica de esta manera: "Estaba cansado del fútbol. Me había saturado tanto, que un día me decidí, fui hasta la sede y pedí hablar con el presidente, contador Ercoli. Le comuniqué mi determinación y de inmediato dejé el club... Era tanto mi deseo por desentenderme de todo, que agarré y me fui a Mar del Plata, con la intención de quedarse uno o dos meses descansando; pero no fue así. Mientras me encontraba en esa ciudad, se apareció Alex Gorayeb, presidente del Deportivo Cali de Colombia para ofrecerme un suculento contrato... Traté de eludirlo, primero, pero después me fue convenciendo. Lo consulté a Carlitos Pachamé que estaba en ese momento conmigo, y me decidí. Contesté que si y entonces seguí ligado al fútbol".
Mientras tanto, en La Plata, se anunciaba que Eduardo Lujan Manera ocuparía el lugar dejado vacante por Bilardo.
Fuente: Diario El Día.
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| Bilardo, Medina, Pezzano, H. Rodriguez, Camilo Aguilar, Recavarren, Grasia, Gomez, Del Curto, De Marta, el Bambi flores, Togneri, Baley, Manceda, Gile, Chirdo y Daniel Romeo |
Esa escuadra se armó con varios elementos provenientes de las inferiores, y en 1974 llego a encaramarse en los puestos de vanguardia, aunque la propia inexperiencia y los desacoples lógicos de un equipo "nuevo" no permitieron concluir con éxito la empresa.
Se habian alejado del club Rubén Horacio Galletti, transferido al Universidad Autónoma de Guadalajara (México) en una cifra récord para la Argentina y también habia sido cedido a un empresario que lo colocó en el exterior, José Ignacio Peña, cuyo aporte de goleador lo llevó a situarse entre los scorers más positivos del futbol nacional. Llegaron para 1974, Miguel Angel Benito, de Vélez Sársfield, luego de arduas y dificultosas tratativas (el centrodelantero era codiciado por varios elencos de los denominados grandes), y José Tagliani, un experimentado zaguero, entre otros. Todo estaba preparado para que 1975 sea el gran año. Y realmente lo fue...
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| Benito, Pezzano, Togneri, Frasoldatti, Cabeza y H. Rodriguez |
1975 fue el mejor año de todos en esta segunda etapa de Carlos Salvador Bilardo como orientador técnico. El equipo base de entonces: Pezzano; Pagnanini, Tagliani, Horacio Rodriguez y Frassoldatti; Reguera, Pachamé y Carlos López; Galletti (retornado de México), Cabezas o Benito y Juan Ramon Verón (regresado de Grecia); dieron que hablar. Había recurrido Bilardo a la experlencia de un marcador, que como Franco Frassoldatti, ya había sido campeón con Chacarita; también se agregaron Carlos Pachamé, que volvía de Boca, Rubén Galletti, repatriado luego de un período exitoso en México y Juan Ramón Verón. Algunos apellidos famosos para el futbol de entonces en nuestro país, y otros que habían sido artífices de la sensacional campaña copera.
En el campeonato Nacional, los estudiantiles arrancan con todo. La solvencia de una zaga sin fisuras, el excelente acople de Pachamé y Carlos Ángel López en el medio sumado al pujante contragolpe de la tripleta atacante fue dando por tierra con varlos "cucos" de la apoca. Aquel equipo había conseguido un equilibrio total en su estructura y, como puntualizaba Bilardo: "No se puede hablar de fútbol defensivo, porque cuando la tiene Carlitos López, y consigue encontrarse con Verón, Galletti o Benito, se produce un juego efectivo, preciso y penetrante. . ."
No todo fue negativo en esa temporada. A raíz de haber ganado River los dos torneos argentinos, debía dirimirse quien lo acompañaría en la Copa Libertadores de América, ya que en ese entonces se había puesto en práctica la participación de dos representantes por país en ese certamen. Se formalizó entonces un cotejo, en cancha neutral, entre Huracán, subcampeón Metropolitano, y Estudiantes, segundo en el Nacional. El lance, disputado en enero de 1976, en el estadio de Racing estuvo rodeado de una expectativa inusual, ya que los albirrojos podrían retornar al torneo de América. El partido finalizó con la victoria de los pinchas por 3 tantos contra 2, luego de 90 dramáticos minutos. Marcaron los goles Frassoldatti, Héctor Milano y Juan Ramón Verón.
De nuevo en la Copa, otra vez los compromisos internacionales, aunque en esta oportunldad sin los resultados de las veces anteriores. Le toco a los alblrrojos enfrentarse a los representantes venezolanos (Estudiantes de Mérida y Portuguesa), junto a River. Los "millonarios" conquistaron el primer lugar en la zona postergando las ilusiones pincharratas.
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| Juan Ramón Verón, Benito, García Ameijenda y Frasoldatti |
El 5 de enero de 1977. Carlos Salvador Bilardo ratificó su decisión de dejar Estudiantes. El mismo, lo explica de esta manera: "Estaba cansado del fútbol. Me había saturado tanto, que un día me decidí, fui hasta la sede y pedí hablar con el presidente, contador Ercoli. Le comuniqué mi determinación y de inmediato dejé el club... Era tanto mi deseo por desentenderme de todo, que agarré y me fui a Mar del Plata, con la intención de quedarse uno o dos meses descansando; pero no fue así. Mientras me encontraba en esa ciudad, se apareció Alex Gorayeb, presidente del Deportivo Cali de Colombia para ofrecerme un suculento contrato... Traté de eludirlo, primero, pero después me fue convenciendo. Lo consulté a Carlitos Pachamé que estaba en ese momento conmigo, y me decidí. Contesté que si y entonces seguí ligado al fútbol".
Mientras tanto, en La Plata, se anunciaba que Eduardo Lujan Manera ocuparía el lugar dejado vacante por Bilardo.
Fuente: Diario El Día.
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groso mazy como siempre!
ResponderEliminarGracias Dani, acá el groso es el Dr...
ResponderEliminarAbrazo!